La compañía Google está protegiendo poco a poco su joya de la corona. El sistema Android comenzó como un sistema operativo de código abierto ofreciendo la posibilidad de que todo usuario lo pueda utilizar de forma gratuita. Pero ahora que Android se ha convertido en el sistema operativo más utilizado en todo el mundo, a Google le gusta cada vez menos el hecho de que muchas empresas se beneficien de su trabajo.
En un principio, los de Mountain View han contado con una estrategia de introducir su sistema operativo en la mayoría de terminales, aunque fuera totalmente gratuito. Pretendían introducir en el mercado móvil una especie de Caballo de Troya que luego podían utilizarlo para beneficiarse.
Era la época en que Apple comenzaba a triunfar con su nuevo dispositivo, el iPhone y la compañía Google tenía pavor de que el iPhone se convirtiera en el dispositivo que domine absolutamente todo el mercado en los siguientes años.
De hecho, en un principio ellos habían prestado sus servicios de búsqueda y mapas a Apple, pero teniendo en cuenta que si ponían todos los huevos en la misma canasta, en este caso hablemos de manzanas, podría resultar muy peligroso en el caso que los Cupertinos tomaran la decisión algún día de prescindir de sus servicios, tal como terminó sucediendo.
El paso del código abierto al cerrado
Es por tal motivo que en un principio a la compañía Google no le importó que cualquier empresa pudiera diseñar su propio sistema operativo basándose en el código de Android de manera gratuita. De este modo Amazon, y por sobre todo el mercado de China desarrollaron sistemas operativos que son de Android pero no pertenecen a Google, de hecho cuentan con sus propias tiendas de aplicaciones.
Pero finalmente Google se ha cansado. Y por tal motivo la compañía se encuentra en un proceso de renovación de todas sus aplicaciones principales como el buscador, el teclado, el calendario, Google Play Music, la cámara, entre otras. Y todas esas aplicaciones, luego de renovarse, se han transformado, pasando de ser código abierto a código cerrado.
Y las consecuencias se pueden apreciar a simple vista. Ponemos como ejemplo, como se puede observar en la foto, la aplicación de búsqueda de Google que antes era de código abierto se ha quedado anclada en el pasado, en su versión Froyo. La nueva aplicación de código cerrado del buscador cuenta con búsquedas con voz, textos con voz, asistente personal, etc., mientras que la aplicación de código abierto que fue dejada de lado por Google sólo permite la búsqueda Web y locales, nada más.
Así ha pasado con todas las aplicaciones que a lo largo de las nuevas actualizaciones de Android ha ido renovando Google. Y en el futuro seguirá siendo así. Google, luego de dominar el mercado de un modo casi dictatorial no quiere que nadie obtenga algún tipo de beneficio de su trabajo y una forma de hacerlo es cerrando la barrera libre que había hasta hace poco tiempo.
Autor: Creado por Julian Rodriguez
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