Esta es la conclusión a la que muchos hemos podido llegar, visto lo visto. El asunto se está tornando negro para Telefónica-Movistar desde hace ya algunas semanas, y no es para menos.
Todo comenzó con las sospechas de que Telefónica introducía serias trabas directamente entre el otro opeardor y el usuario, para evitar que el operador que quería realizar una portabilidad solicitada por el usuario, tuviese todo tipo de problemas y dilemas para poder realizar correctamente la portabilidad.
Esto, en otras palabras, se traduce en que Telefónica no sólo se beneficiaría a sí misma más que a los demás operadores, sino que además, estaría quitando clientes al resto de operadores de una manera plenamente irregular.
La Comisión Mercantil de las Telecomunicaciones ha confirmado que están estudiando seriamente el caso, y que por ahora se habla de incluso, multas que rondarían los millones de euros. ¿Será esto cierto? ¿O sólo quedará en una insignificante multa?
Vía: Banda Ancha
Autor: Daniel Piñas